INTRODUCCIÓN

El tumor phyllodes fue descrito por primera vez por Johannes Muller en 1838, quien lo denominó cistosarcoma phyllodes por su aspecto carnoso, con hendiduras en su interior semejantes a las hojas de un libro.¹  Han pasado los años y ha recibido múltiples denominaciones, hasta establecerse por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como: tumor phyllodes de la mama.

Histológicamente es una neoplasia fibroepitelial de la mama, con un componente epitelial benigno y un componente mesenquimal que puede ser benigno o maligno.²

Los tumores phyllodes se clasifican en: benignos, malignos e intermedios. También pueden clasificarse como tumores phyllodes Grado I, II y III.³

Aparecen fundamentalmente en el sexo femenino y en la cuarta o quinta décadas de la vida, siendo muy raros en las niñas y adolescentes.^4,5

Su crecimiento consta de dos fases: una primera fase larga y de crecimiento lento, y una segunda fase corta de crecimiento rápido.³  En cuanto al tamaño este puede ir desde unos pocos centímetros hasta lesiones masivas que afectan toda la mama.⁶

El diagnóstico se realiza basándose en la anamnesis, el examen físico, el ultrasonido mamario, la mamografía, las pruebas de inmunohistoquímicas y la biopsia escisional con sus variantes por congelación y por parafina.^3,7

En los tumores phyllodes benignos el tratamiento de elección es la exéresis de la tumoración con 2 cms. de márgenes libres de sección.⁷  En los tumores phyllodes malignos la mastectomía total ampliada es la técnica quirúrgica de elección.^8,9

PRESENTACIÓN DEL CASO

Se presenta el caso de una paciente de sexo femenino, de 50 años, procedente del municipio de Rodas que acudió a la consulta central de mastología por presentar una tumoración de la mama derecha.

Al examen físico se palpó una tumoración redondeada, de consistencia fina que ocupaba gran parte de la mama derecha, sin adenopatías axilares, retracción del pezón ni piel de naranja. En el interrogatorio se recogió como dato, el crecimiento rápido de dicha tumoración en las últimas semanas después de haber aparecido. (Figura 1).

Se le realizó ultrasonido y mamografía, así como biopsia por aspiración con aguja fina que informó la presencia de un posible tumor phyllodes.

Se realizó la exéresis de la tumoración con biopsia por parafina, en la cual se notificó la presencia de un tumor phyllodes benigno. (Figuras 2 y 3).

Por lo poco frecuente de esta enfermedad tumoral de la mama se decidió realizar su publicación.

DISCUSIÓN

Los tumores phyllodes, como los fibroadenomas nacen del estroma intralobulillar. Suelen aparecer a partir de la cuarta década de la vida, 10 o 20 años más tarde que los fibroadenomas, siendo muy raros en niñas y adolescentes.¹

Los tumores phyllodes se diferencian de los fibroadenomas, en que estos últimos son mucho más frecuentes, la celularidad del phyllodes es mayor, así como el índice mitótico, el pleomorfismo nuclear y el crecimiento del estroma.^1-3

En su evolución presenta dos fases: una de crecimiento lento, y otra de crecimiento rápido.

El tumor en este caso presentaba todas las características del tumor phyllodes, tanto clínicas como anatomopatológicas. Se realizó la exéresis de la tumoración con biopsia por parafina, en la cual se notificó la presencia de un tumor phyllodes benigno, como el reportado en otro caso que se presentó con anterioridad.⁵