El director médico del Grupo IVI, Antonio Requena, y el director de la  clínica IVI en Lisboa, Sergio Soares, han advertido este viernes en  rueda de prensa a propósito del V Congreso IVI de que los factores  ambientales, entre los que han citado la obesidad, el consumo de tabaco o  la exposición a plaguicidas, están afectando "cada vez más" a los  tratamientos de reproducción asistida, así como a la salud del futuro  neonato.    Ambos especialistas han admitido que la etapa preconcepcional "tiene  cada vez más influencia sobre los resultados del embarazo y el estado de  salud a largo plazo" del bebé.    Así, y a modo de ejemplo, han asegurado que los niños nacidos de padres  que han estado expuestos a estos factores ambientales nocivos  desarrollarán más problemas sanitarios en el futuro. "Ya no estamos  hablando de que los padres expuestos a estos factores ambientales tengan  mayores dificultades para tener un hijo, sino que los bebés nacidos de  esos embarazos desarrollarán más problemas", ha señalado Requena, quien  ha alertado, asimismo, de que el riesgo de que una madre obesa tenga un  hijo que desarrolle en un futuro este problema "es el doble" que el de  los padres con un IMC normalizado.    La obesidad, ha indicado este experto, es un factor de riesgo importante  para el desarrollo de enfermedades crónicas como el síndrome  metabólico, la diabetes tipo II o dolencias cardiovasculares. "No sólo  tenemos que centrarnos ya en lo que es el manipular bien el material  biológico de la pareja, sino cuidar de que la pareja entre en este  proceso para la fecundación in vitro en las mejores condiciones", ha  añadido.    Del mismo modo, ambos especialistas han resaltado también que el estrés y  el retraso en la edad de búsqueda de la descendencia influyen  igualmente en el aumento de la infertilidad de las parejas. En este  sentido, han detallado que en la actualidad hay 800.000 parejas  españolas que sufren problemas de fertilidad, y que las tasas de  infertilidad se sitúan entre el 15 y el 17 % de la población.    De otro lado, han aludido al "futuro prometedor" del uso de células  madre en este campo. "Esto abre una puerta a que en un futuro personas  que no son capaces de producir de forma espontánea ovocitos o  espermatozoides, bien por una menopausia o por problemas de salud,  pudiéramos conseguir que se produjeran esos ovocitos o espermatozoides  con células madres", han reseñado. Tomado de Jano  |