Historia de la revista

La revista Finlay, perenne tributo a la personalidad de Carlos Juan Finlay como figura cumbre de la ciencia en Cuba, ha pasado al menos por tres etapas importantes desde su surgimiento hasta la actualidad.

Primera etapa

Nace la Revista Finlay el 28 de enero de 1987, fecha escogida para hacer la presentación de su primer número. Desde finales de 1986, un grupo de estudiantes de medicina se propuso el reto de publicar una revista que reflejara el quehacer científico del territorio en el campo de la salud. La entonces presidenta de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU) de la Facultad, Yamila de Armas Águila, convocó, para que se hiciera cargo de la dirección de la Revista, a otro estudiante: Pedro Ordúñez García. En este empeño inicial se nuclearon otros alumnos, entre los que se destacaron Humberto Miguel Cabrera y Salvador Tamayo Muñiz, así como algo más de una docena de profesores que acogieron con entusiasmo esta iniciativa. Con la colaboración de un grupo de trabajadores de la propia Facultad (dibujantes, fotógrafos, mecanógrafos y filólogos del Centro Provincial de Información de Ciencias Médicas), de la imprenta de la Central Electronuclear en construcción, de Juraguá y el apoyo de las máximas autoridades políticas de la provincia en esa época, vio la luz el primer número de la Revista Finlay el 28 de enero de 1987, para beneplácito de muchos y para asombro de otros. A fines de 1987, después de varios encuentros con las autoridades del sector de la salud del territorio, se plantea que la Revista Finlay se convierta en el órgano científico de los profesionales de la salud en Cienfuegos y se designa al Dr. Alfredo Espinosa Brito, como Co-Director de la publicación. Se crea así una estructura más funcional, con un Comité de Redacción, un Consejo Asesor más amplio; y, aunque se mantuvo con una frecuencia trimestral, se incrementó el número de páginas. La producción, desde aquel enero de 1987 hasta los momentos actuales, ha sido prolífica, abundante, a pesar de las duras limitaciones económicas que se impusieron en la década de los 90, precisamente cuando la Revista iniciaba su despegue editorial. Siempre se logró que las ediciones llegaran a las manos de un número considerable de lectores, desde los locales, hasta los de otras provincias del país o de otras latitudes. Un apretado resumen muestra los significativos resultados del período transitado hasta hoy: 9 volúmenes con 33 números, donde se publicaron en aproximadamente 2526 páginas 347 trabajos, sin contar los Editoriales, Cartas a los Lectores, Presentaciones, Noticias y Anuncios. Si a esto añadimos los 7 trabajos que con formato de libro que salieron de las imprentas bajo su cuño editorial, la cifra se cierra en 40 ediciones. Nunca se dude al recurrir a todos esos números, pues atesoran, a pesar del paso del tiempo, una abundante información que no dejará de tener vigencia. La Revista Finlay recoge en su historia el hecho de que, desde sus páginas, en noviembre de 1989, el Comandante en Jefe Fidel Castro felicitó a los lectores, lo que representó en lo adelante un permanente acicate y compromiso. Los que conservan el número 4 del volumen 3, del año 1989 antes citado, pueden preciarse de guardar una pieza de gran valor. Es precisamente ese número el primero acreditado por ISSN. Nombres de distinguidas personalidades de la Salud Pública mundial y nacional han dejado su impronta en la Revista Finlay durante estos años: Milton Terris, Pekka Puska, John A. Ryle, Rosa Elena Simeón Negrín, Zoilo Marinelo, Ignacio Macías Castro, Alberto Hernández Cañero, Feliz Ilizastegui, J.P. Martínez Delgado, Luis Rodríguez Rivera, J. Roberto Menchaca y Jorge Aldereguía Henríquez. Mientras que de los animadores locales es imprescindible citar a Alfredo Espinosa Brito, Pedro Ordúñez García y Juan J. Apolinaire Pennini. Ellos tres, además de fundadores y sabios promotores de la Revista Finlay, representan a toda la familia de los profesionales y técnicos de la salud que hicieron su modesta contribución con la publicación de sus trabajos. El denominado “período especial”, situación difícil de la economía cubana que afectó de manera significativa todos los sectores de la sociedad, unido a otros factores, provocaron a mediados de la década de los años 90 la interrupción de las salidas de la revista.

Segunda etapa

A principios de la primera década del presente siglo, las publicaciones científicas entre los profesionales de la salud de Cuba estaban muy deprimidas, y Cienfuegos no era la excepción. En los años transcurridos desde el cese de Finlay, hasta el surgimiento de Medisur, en el año 2003, la otra revista científica médica del territorio, el número de publicaciones no pasaban las 20 entre todos los profesionales de salud al año. En esto influía mucho la ausencia de una revista local. En ese contexto y por las presiones constantes de los profesionales del territorio, en el año 2003 comienza a salir nuevamente Finlay, en formato impreso, con un número dedicado al Programa Materno Infantil y posteriormente con una serie de números dedicados a Pediatría, Higiene y Epidemiología, Enfermedades Crónicas no Transmisibles y Desastres. En el año 2007 se publicó su último número monotemático de esa segunda etapa y así cerró un ciclo de publicaciones dedicadas a temas de gran importancia e impacto.

Tercera etapa

Ya en el año 2010, es retomada la edición y publicación de Finlay, a instancias del Centro de Estudio para las Enfermedades Crónicas no Transmisibles de la Universidad de las Ciencias Médicas de Cienfuegos. En esta tercera etapa, la revista tiene como objetivo fundamental visualizar los artículos científicos de los profesionales de la salud, en Cienfuegos, Cuba y el mundo, destinados a difundir las investigaciones en el campo de las enfermedades crónicas, fundamentalmente las relacionadas con los procesos vasculares y el cáncer. El colectivo editorial asume no solo la responsabilidad de revitalizar la revista Finlay, sino también un compromiso futuro basado en la propia historia de esta, que en su momento funcionó como órgano de las ciencias de la salud en Cienfuegos, y que en lo adelante deberá mantenerse con los mismos bríos de aquel 28 de enero de 1987, en aras de apoyar el desarrollo de la ciencia.



FINLAY EN: google_acadmico_75 doaj_75 bvs_75 latindex_75medigraphy_75

FINLAY CERTIFICADA POR:

certificacin_citma_75

 Esta revista "no aplica" cargos por publicación en ninguna etapa del proceso editorial.

Facebook Twitter

Equipo Editorial

 

Dirección postal: Calle 51A y Avenida 5 de Septiembre Cienfuegos, Cuba Código postal: 55100.
http://www.revfinlay.sld.cu
Telefono: +53 43 516602. Telefax: +53 43 517733.
amgiraldoni@infomed.sld.cu
ISSN: 2221-2434
RNPS: 5129